Dormir a gemelos
¡Paciencia!
Si el sueño del recién nacido es uno de los temas que más complican la vida de la pareja, imagínate cuando te llegan dos a la vez. Más paciencia y más ayuda son las palabras claves.

Quizá el sueño sea lo más complicado cuando nacen gemelos. Sobre durante las primeras semanas porque cada uno tiene su propio reloj biológico y pueden coincidir o no. Cuando esto sucede, sus cuidados se complican bastante.
¿En la misma cuna?
Tus pequeños han pasado 9 meses compartiendo tu vientre y eso ha creado entre ellos un vínculo especial. En ocasiones, lloran cuando se les acuesta en cunas separadas. Se sienten más a gusto compartiendo lecho. Pero cuando sus ritmos de sueño son distintos, es preferible que duerman por separado para que los dos puedan descansar.
A partir de la cuarta semana, su sueño irá poco a poco ordenándose con sus horarios de comida y podrás organizarte mejor. Mientras tanto, ¡paciencia!
Ayuda, por favor
La falta de sueño y el cansancio acumulado son los peores enemigos de los padres con gemelos. Hay que pedir ayuda: madres, padres, hermanos, tíos, cualquier mano es buena. Procura que acudan a la hora de los baños y, según lleguen…, ¡a dormir! Hay que recargar la batería.
Con una buena rutina, paciencia y buena voluntad conseguirás ir acercando sus horarios y lograr que duerman 8 o más horas de un tirón. Normalmente, este feliz acontecimiento se producirá en torno al año. Pero para ello, habrá que respetar sus horarios, establecer rutinas claras y ser constante con los hábitos.